[Pots llegir l’entrevista en català aquí]
(Lunes, 7 de octubre de 2013)
MARTA ESCOBAR MARTÍ
Joan Comas es el director de Coral Transports, una empresa catalana que se dedica al transporte internacional a nivel logístico. También es el presidente de la sociedad Iberteam , concebida en 2010 con un objetivo claro: agrupar empresas españolas del sector de la logística , o similar , en una misma sociedad para «tener unas mismas reglas e imagen de cara a Europa». Eso sí, manteniendo la independencia individual y bajo el lema «Fuertes en casa, abiertos al mundo». Comas está afiliado a la ADEG, una asociación empresarial del Garraf y El Penedès en Catalunya. Interesada por una empresa como la suya, de raíces catalanas y extendida por todo el mundo, me desplazo a Vilafranca del Penedès para conocer una nueva visión empresarial.
¿Qué es importante para que triunfe un negocio ?
Hay diferentes factores. Es necesario seleccionar un buen producto, que tenga los medios de financiación sanos y recursos para poder salir adelante y poner toda la ilusión posible para que este proyecto que se pueda iniciar llegue a un buen puerto.
Actualmente, y teniendo en cuenta el incremento de las exportaciones catalanas (54,3% frente al 45,7 %), ¿qué mercado pesa más para las empresas catalanas: el español o el internacional?
Nosotros somos operadores logísticos que estamos en el mundo de la exportación y del transporte internacional y nacional. Hoy, puedo decir que nuestra organización depende, sobre todo, de los clientes que exportan e importan. El comercio exterior es el que nos da la esperanza de poder aguantar nuestras empresas. El mercado nacional es justamente lo contrario porque ha quedado muy reducido. Queremos continuar con esta trayectoria a nivel de la exportación y en todo el mundo, entre otros países de América Central y del Sur, no sólo de Europa.
El descenso de la demanda del mercado español, ¿se debe a la crisis o el proceso soberanista tiene algo que ver?
Yo creo que toda la situación es un problema exclusivamente de la crisis. Hoy, desde mi perspectiva, no tenemos ninguna sospecha de que esta situación afecte a nuestro comercio ni de que ninguna actividad quede afectada por lo que vivimos en estos momentos.
¿Qué representa una empresa como Coral Transports para Catalunya y para su economía?
Nosotros, como operadores logísticos, tenemos una relevancia importante porque somos los que creamos los conductos de los acuerdos a qué llegan nuestras empresas de Catalunya y de fuera. En Catalunya tenemos una parte estratégica con flujos de mercado como el chino y el de Extremo Oriente gracias al puerto de Barcelona. Hoy en día, el operador logístico todavía mira el futuro con cierto optimismo.
Si Catalunya dispusiera del Corredor Mediterráneo…
Esta es una de las cosas con las que realmente estamos un poco impactados por la poca voluntad que vemos por parte del gobierno actual porque nosotros creemos que es determinante para el futuro. Y no sólo para Catalunya, sino para el resto de la Península Ibérica. Es vergonzoso que después de veinte años, el enlace del AVE con el resto de Europa aún esté pendiente. No obedecen a reglas económicas, sino que los intereses políticos sacan peso en la franja mediterránea para dárselo al centro.
Aunque, como me ha dicho, a Coral Transportes no le afecta el proceso soberanista, ¿cree que sí puede influir en otras empresas catalanas o ubicadas en Catalunya?
Ya vivimos una experiencia [de boicot] con el tema del cava y eso nos ha hecho despertar para buscar nuevos mercados y nos ha demostrado que, en un momento determinado, puede haber alguna situación puntual. No olvidemos, sin embargo, que esta situación sería en ambos sentidos porque Catalunya también compra mucho en el mercado español. Nuestros camiones que salen a la distribución nacional vuelven con mercancías. Cuando los franceses nos quemaban en la frontera los camiones de fruta, se pedía que hubiera una reacción de bloqueo a la hora de comprar productos franceses como represalia por lo que nos hacían. Pero el comercio siguió igual y es lo que considero que debería de pasar aquí.
Entonces, ¿el miedo al boicot es por la rumorología que crean los políticos y ciudadanos ?
Sí, y que también puede haber ciertas reacciones pero que serían más viscerales que desde la perspectiva empresarial.
De hecho, el sector del cava salió reforzado con el boicot de 2005, cuando ganó un 7% de las ventas en el extranjero y más tarde recuperó las del mercado español.
Con un proceso como el que estamos viviendo debemos ser conscientes de que no todo será positivo. Pero debemos valorar qué nos representa quedarnos como estamos ahora.
¿Cómo debe afrontar un empresario que tiene parte de su negocio repartido por el Estado el proceso soberanista?
Lo que hay que hacer es ir por la vía del diálogo y de la negociación y nunca atacando. No hay que ir en contra de nada para conseguir algo que realmente creemos que es más justo para los catalanes, tanto para las empresas como para las personas. Y si esto lo llevamos correctamente no tiene por qué haber una consecuencia muy alarmista.
¿Y si se agota la vía del diálogo?
Es diferente si hablamos desde la perspectiva política que empresarial. Los empresarios debemos buscar el diálogo, es decir, hacer entender cuál es nuestra situación y por qué estamos en este proceso. Si esta entrevista me la hubieras hecho hace cinco años, yo hubiera dicho, como empresario, que dejemos el proceso. Hoy, estoy más convencido de que es necesario iniciarlo pero haciendo comprender que no tiene por qué ser un agravio contra nadie, sino una necesidad para el propio país. Además, culturalmente somos diferentes.
Usted, como presidente de la sociedad Iberteam, que tiene trato con empresarios del resto del Estado, ¿me podría decir cómo ve este proceso el empresariado fuera de Catalunya?
Creén que esto no saldrá adelante y no lo ven como una amenaza.
Pero, ¿son conscientes de que el pueblo de Catalunya reclama un cambio social y político? Incluso, Esperanza Aguirre dijo que «hay que catalanizar España».
Simplemente no creen que esto pueda suceder. Ha habido muchos agravios comparativos. Nuestro sector se encarga de hacer estocaje de muchos productos, entre ellos, los químicos peligrosos. Las normas son comunes para todo el Estado pero, sin embargo, el rigor con la aplicación de estas normas no es igual en Catalunya que en muchos lugares del resto de la península. Luchamos con competencias desleales, aunque las reglas sean las mismas. Ha habido empresas logísticas que han decidido trasladarse a otras regiones de la península por la aplicación del rigor, que supone costes, y es mucho más sencilla que aquí. Esta situación es complicada pero ya estamos en ella. Lo que tenemos que intentar es que el futuro que queremos no sea peor que el que tenemos ahora.
Sin embargo, en la situación de crisis que vivimos cuesta imaginar cómo sería una Catalunya independiente.
Exacto. Pero debemos pensarlo y hay que hacer más estudios, que ya se están realizando. Lo peor que nos puede pasar es quedarnos como estamos ahora. Y más viendo la poca inteligencia de la capacidad negociadora, porque nos están haciendo llegar a unos extremos que, si el Gobierno español lo hubiera llevado de otra manera, no estaríamos como estamos ahora. Si el proceso de soberanía sale adelante, ya no nos podremos excusar en el Gobierno español. Y si hay voluntad, lo podemos gestionar de otra manera porque culturalmente somos diferentes. No mejores ni peores, diferentes.
Para hacer un poco de futurología, ¿Coral Transports teme que, en una hipotética independencia, Catalunya pueda quedar fuera de la Unión Europea?
Nos afectaría, pero lo que no sé decir es si para bien o para mal. Si no entramos en el mercado común, los trámites aduaneros entrarían con mucha fuerza, que para el sector de la logística son el negocio más importante y en el que tenemos más ingresos desde el año 92. Ahora bien, pensar así sería ser egoísta. Pero es un tema que debe de ser especulado y evaluado ya para cuando llegue el momento.
Antes le preguntaba cómo ve el empresariado español el proceso iniciado en Catalunya . ¿Cómo lo perciben los empresarios del resto del mundo?
Catalunya es la que es y no tiene un peso específico trascendental para el resto del mundo. Pero hay dos tendencias dependiendo del país en que lo comentes. Hace poco, en unas reuniones internacionales en las que estuve en Milán, comentábamos la situación y lo ven desde una perspectiva no preocupante, y a veces incluso simpática, pero no lo entienden bien. La parte política sí que empieza a estar más sensibilizada.
¿Piensan en seguirse abriendo a nuevos mercados?
Nos abrimos, pero no por la situación de ahora, lo hacemos desde el principio. Tenemos corresponsalías en el resto de Europa y en otros puntos del mundo. Nuestra empresa ha diversificado en muchos productos dentro del mundo de la logística y ello ha permitido abrirnos a nuevos mercados.
¿Cuáles son las ventajas de abrirse al mundo ?
En estos momentos, todo operador logístico que sólo se ha enfocado en el mercado nacional lo está pasando muy mal por la crisis y por ello es necesario abrirse a mercados internacionales. Pero todavía hay empresas dentro del territorio español que aún lo ven muy lejano.
Para una empresa como Coral Transports, ¿un estado propio para Catalunya puede ser beneficioso, perjudicial o indiferente?
Peor no nos sería. Y mejor… habría que verlo.
El empresario francés Alain Minc declaró que la independencia es una «tontería» y aseguró que en caso de que Catalunya se independizara no entraría en la Unión Europea. ¿Qué opina sobre esta afirmación?
Si a mí no me afectara la temática y, por ejemplo, pasara en Alemania, no me preocuparía y diría que por qué debe separarse si ya estáis bien como estáis. Es muy fácil decir esto pero a mí estas declaraciones no me afectan.
¿Es importante que un empresario se posicione políticamente o, por el contrario, debe mantenerse al margen?
Llega un momento en que tenemos que ser valientes. No puedo hablar por el resto de empresarios pero si las cosas se hacen con respeto y negociando y tu te identificas con lo que eres, o con lo que quieres ser, no diremos todo lo que quisiéramos decir, pero si callamos aceptamos una situación.
¿Se deberían reinventar los proyectos empresariales para encarar el futuro?
Ya se han hecho muchas cosas pero todavía hay empresas que no detectan los problemas que tienen. Pero claro, la situación pesa mucho ahora y nos falta el flujo para llevar a cabo muchas iniciativas que por la crisis no se pueden realizar.
¿Qué ventajas conlleva estar afiliados a ADEG (Associació d’Empresaris Garraf, Alt Penedès, Baix Penedès)?
Nos ha servido de mucho. Nos aporta relaciones, conocimiento empresarial, darse a conocer en otros campos… Podemos contrastar información , experiencias y opiniones. El trabajo que está haciendo la ADEG es impresionante.